Megadeth - Th1rt3en - Roadrunner - 2011
Del llamado Big 4, solo Megadeth es una banda de la que aún espero algo. De Metallica ya no, de Slayer aún me duele lo que hacen y Anthrax me ha hecho abrigar alguna esperanza de nuevo con Worship Music, pero Megadeth es aún un grande de verdad. Ellos supieron vivir con los 90 sin que estos destruyesen su legado. De hecho, el estilo creado por Megadeth siguió evolucionando a través de sus discos en esa década. Su único punto flaco debe haber sido Risk (1999), pero entre tantos anteriores y posteriores de calidad, no podemos reprocharles algo irregular, si hasta Priest ha metido la pata alguna vez.
Sin embargo, el siglo XXI, ha sido generoso con Megadeth que ha sabido llevar una carrera de sólidas producciones. The World Needs a Hero (2001), System Has Failed (2004), United Abominations (2007), Endgame (2009) son trabajos de calidad, no igual entre ellos, pero el balance es positivo. En mi opinión los dos mejores son los últimos, que han recuperado gran parte de la rabia original del grupo. Th1rt3en, el álbum que nos convoca, no está tan vinculado con esos dos, sino con los dos anteriores, sobre todo con The System Has Failed. Con lo que regresa a sonidos un tanto más suaves, pero eso no es absoluto. Vayamos por partes.
El disco en cuestión tiene algo de recopilatorio pues 5 temas ya son conocidos, tres de ellos son carars b de singles anteriores y han sido regrabadas, con algunos cambios, y dos más son piezas que aparecieron en videojuegos. Las otras 8 canciones son diferentes y tienen un sonido más acorde con lo que hacen actualmente. Sudden Death y Never Dead son los temas que ya han aparecido en videojuegos y son bastante técnicas, llenas de cambios supongo para explotar eso en dichos soportes. Como comienzo del disco, Sudden Death queda perfecta y reúne bastante del Megadeth más interesante e intenso. Originalmente apareció para Guitar Hero: Warriors of Rock y es el primer tema que graba Dave Ellefson con Megadeth desde el 2002. Never Dead es un tema más cinematográfico, con una intro sonora lenta y un cuerpo melódico intenso no muy veloz, es muy destacable la forma en la que canta Mustaine. Apareció en el juego Never Dead, de Konami, que fue desarrollado por los estudios Rebellion Developments. Dicho sea de paso, algunos headbangers no les gusta que canciones de metal aparezcan y animen videojuegos, supongo que porque consideran que es una especie de malbarateamiento del metal. De hecho hay una motivación comercial pero creo que la aparición de temas de metal en esos videojuegos ha servido para captar muchos adolescentes y niños para el metal (instruye al niño en su camino, y aun cuando fuere viejo… je je je).
Los otros temas que ya aparecieron son New World Order, Millenium of the Blind y Black Swan, temas que corresponden a sesiones de grabación de 1991, (Countdown to Extinction, supongo) y aparecieron en la edición de lujo del Youthanasia. Pero están regrabadas con cambios, no son los mismos tracks de entonces. La primera está casi igual a como aparece en esas ya antiguas grabaciones y me sigue pareciendo que es una canción que no terminó de tomar forma, sobre todo la parte del medio tiempo. El punteo es muy bueno. Millenium of the Blind sí ha cambiado más y ha quedado bastante mejor. Las partes de guitarra han ganado con la participación de Chris Broderick. El tema va avanzando con tonadas metálicas que remiten al pasado thrash de la banda. Los cambios son interesantes y te mandan de regreso a 1990, cuando Forbidden, Death Angel, Sanctuary, Annihilator y Testament sacaban sus mejores discos. Black Swan es bien heavy metal, con toques U.S. power en este tema se hace patente una de las mayores influencias de Mustaine y que a veces la gente ignora: Alice Cooper. El Megadeth más rock es claramente una derivación del trabajo de Alice Cooper de los últimos 70. Es más, este disco está lleno de esa influencia, solo basta recordar eso para notarlo en varios de los temas.
Los temas nuevos son un poco otra historia, Public Enemy Number 1 es un muy buen track de speed metal luego del inicio con Sudden Death, es un clásico instantáneo de Megadeth. Las guitarras afiladas intervienen en algunos momentos del tema que es llevado por la percusión. La voz de Mustaine está genial en esta canción y es muy agresiva, incluso las partes melodiosas se oyen insidiosas. Whose Life (Is It Anyway?) representa al Megadeth punk, un Megadeth que me encanta y que se expresó sobre todo en un disco que no es muy predilecto de los headbangers, el Cryptic Writings, en canciones como The Desintegrators y F.F.F. (que en aquellos años hasta pensé que eran covers). El coro es punk con todo y le da mucha energía al disco, la parte técnica en esta canción es bastante elemental, se trata de algo directo a tu sistema nervioso central. Luego sigue We The People, tema muy político (así comienza la constitución de los Estados Unidos: “Nosotros, el Pueblo de los Estados Unidos…”) Una canción muy bien estructurada y pensada, me gusta la forma en la que está ensamblada. Bueno, no todo el disco anda bien, Guns, Drugs and Money debe ser uno de los temas más aburridos e intrascendetes de la historia reciente de la banda. Pásenlo por alto después de escucharlo una vez, (pa’conocerlo nomás). Fast Lane es una canción muy buena de esas que transmiten energía y puede ser catalogada de speed metal. Wrecker es más técnica y un poco más contundente aunque la voz no toma más matices y aburre un tanto. Deadly Nightshade es otro de esos cortes hardrockeros en los que se nota una huella setentera en el trabajo de la banda, con su respectivo y laudable trabajo en guitarras. El último corte es 13 y le da el nombre al disco. Su temática es autobigráfica e introspectiva acerca de la suerte y la sobrevivencia. Este disco es el número 13 de la discografía de una banda cuyo líder ha pasado por casi dos decenas de rehabilitaciones por abuso de drogas y alcohol. Es un medio tiempo que por momentos en intención me recuerda a Silent Screams de Halford. Su parte intrumental hacia la segunda mitad del tema está entre lo más valioso del disco.
En resumen, estamos ante un disco corrrecto y bastante apreciable, pero no genial y por debajo de los dos trabajos inmediatamente anteriores. Nadie va a descubrir a megadeth con este álbum. Los fans de Megadeth gustarán sin duda de él. Los demás, quizás no deberían arriesgarse, a los que no les gusta Megadeth no se acerquen. Esta clase de trabajos son los que mantienen viva a la banda pero no la hacen más grande. Megadeth ya es inmenso y creo que crecer aún es posible pero habrá que esperar a otra ocasión.
Alineación:
Dave Mustaine: Voz/Guitarra
Dave Ellefson: Bajo
Chris Broderick: Guitarra
Shawn Drover: Batería
Johnny K. : Productor
Sello: Roadrunner