¿Qué hacer si diste positivo de COVID-19? Aquí un relato de lo que me pasó
Hace poco más de tres semanas, di positivo en la prueba molecular. Me hice la prueba porque había estado de viaje y estuve en las marchas, así que antes de ver a mis papás quería estar segura de que no tenía el virus.
Lo mío empezó como una faringitis, algo muy usual en mí en esta época del año. No tenía la mínima sospecha de que podía ser COVID-19. Mis síntomas eran leves. El martes 17 de noviembre sentí el primer síntoma: una ligera molestia en la garganta y dolor de cabeza. Nada que no se pueda soportar. Dos días después, el dolor de cabeza se agudizó. Cuando me tomaba la temperatura, siempre el termómetro marcaba 36,5º. No tenía fiebre y no la tuve, tampoco perdí el olfato ni el gusto.
El viernes 19 llamé a mi seguro, después de hacerme varias preguntas sobre mi salud, me programaron un médico a domicilio y una prueba molecular. El doctor vino y confirmó lo que pensaba: faringitis. Al día siguiente vinieron a hacerme el hisopado y el lunes, a las 8:00 a.m., ya tenía la respuesta en mi bandeja de correo: POSITIVO.
Confieso que en ese momento me asusté. Me puse ansiosa y llamé a un gran amigo médico infectólogo que vive en Argentina y me dijo: “si tus síntomas empezaron el martes, ya pasaste lo peor, tranquila, solo descansa y toma bastante líquido. Si tienes algún síntoma nuevo llama a tu médico para que te monitoreen”. Esa conversación calmó mi ansiedad e hizo que empiece mi plan: llamar a mi papá y a mi mamá para darles la noticia, sabía que si ellos me veían bien (por videollamada) estarían tranquilos. Lo segundo fue avisarle a mi jefa y equipo. Y lo tercero y más importante: organizar mi plan nutricional.
Durante diez días me llamaron más de quince personas para monitorear mi salud, algunos eran médicos y otras enfermeras de EsSalud y de Rimac Seguros. Recibí tanta información diversa que terminé muy confundida. Algunos me decían que después de los catorce días de cuarentena (contando desde el primer día de síntomas), debía hacerme una prueba de sangre; otros, que debo ir al neumólogo para sacarme una placa. Y además de toda esta información, estaban los opinólogos y opinólogas (amig@s) que te dan sus recomendaciones y te asustan más.
Así que decidí buscar a una fuente fidedigna que pueda aclarar todas estas dudas. Por intermedio de un amigo, contacté al doctor José Eduardo Gotuzzo Herencia, médico internista con especialidad en Enfermedades Infecciosas y Tropicales y, miembro del Comité de Expertos del Ministerio de Salud.
El doctor Gotuzzo Herencia es profesor adjunto del William J. Harrington Training Programs for Latin American de la Universidad de Miami, profesor adjunto del Departamento Internacional de Salud de la Universidad Johns Hopkins, profesor adjunto del Departamento de Medicina de la Universidad de Alabama en Birmingham, EE.UU., profesor principal de la Facultad de Medicina de la UPCH, fue jefe del Departamento de Enfermedades Infecciosas y Tropicales del Hospital Cayetano Heredia, y director del Instituto de Medicina Tropical Alexander von Humboldt (1995 – 2017).
Menciono las credenciales del Dr. Gotuzzo Herencia porque creo que es importante saber y reconocer quién es la persona que nos está dando recomendaciones. Estas fueron las preguntas que le hice:
¿Una persona con COVID-19 hasta cuándo contagia?
Después de que tú tienes una prueba de chequeo y encuentran que eres positivo, pero no tienes síntomas, tienes que quedarte siete días aislada. Después de siete días que no has hecho síntomas, ya no contagias. Por lo tanto, puedes regresar a tu vida normal.
¿Y en el caso de una persona que sí ha tenido síntomas?
Tiene que estar dos semanas de aislamiento desde que comenzaron los síntomas, después de ahí ya no contagia. Claro, alguien te puede decir: mira, yo he leído sobre un caso…, un caso no es nada desde el punto de vista de la salud pública.
¿Es recomendable visitar a un médico internista después de este tiempo?
Sí, inicialmente te debe ver un médico internista o un médico general y que te chequee bien, para ver si necesitas una placa, una tomografía, etc.
Entonces, no es necesario después de haber pasado la cuarentena que me haga otra prueba…
No, ninguna prueba, no se necesita. El alta es clínica y no requiere análisis, esto está establecido en los protocolos del 9 de junio. La prueba solamente sirve para establecer diagnóstico, no sirve para establecer estadio clínico. Es un error decir: “ah, tú tienes IgG quiere decir que ya te infectaste”, no, porque algunos pacientes comienzan con IgG y después viene la IgM, cosa que no ocurre con otros virus. Por lo tanto, en las pruebas, es un error que algunos laboratorios informen que si tú tienes IgM más IgG quiere decir que estás en este momento contagiando. Eso es absolutamente falso. Las pruebas no te dicen cuándo estás contagiando, lo único que te dicen es que tienes la infección y nada más.
¿De qué manera sirven las pruebas?
Las pruebas sirven de manera diferente, no es que son malas o son buenas. Las pruebas moleculares te dan 80%-85% de diagnóstico la primera semana, pero la segunda semana el porcentaje baja. Por eso hay pacientes que terminan hasta con respirador, que hacen una prueba molecular y sale negativa. ¿Por qué? Porque cuando tú tienes 15 días de enfermedad la efectividad de la prueba molecular solamente será del 50%. Mientras que cuando haces la prueba de sangre es absolutamente al revés. Si yo me hago una prueba de sangre después de cuatro días va salir negativo en la mitad de casos, y en la segunda semana el 80% van a ser positivos, y a partir de los 15 días, más del 98% van a tener pruebas positivas.
El virus se queda en el cuerpo sin que eso signifique que la persona esté contagiando, ¿verdad?
Lo que pasa es que cuando el virus ingresa al cuerpo se mueve por todo el organismos y el PCR lo puede detectar por más que ya no seas contagiante. Eso se ha visto en todas las enfermedades infecciosas, en tuberculosis, brucelosis. Por ejemplo, yo curo una tuberculosis, pero el PCR sigue positivo por meses de meses. ¿Por qué? Porque el microbio todavía lo estoy limpiando de mi organismo, pero ya no contagia. Entonces hay que dividir lo que es el contagio de las pruebas. Es un absoluto error pretender saber cuál es la situación del virus haciendo pruebas. Las pruebas solamente te dicen si hay o no infección.
¿Qué pasa con los pacientes que tienen una prueba de sangre positiva y otra negativa?
Ese paciente tiene un falso positivo, o tiene un problema de error técnico. Pero para definir que un paciente ha tenido infección, tiene que tener dos pruebas de sangre positivas. Mucha gente dice “no, es que mi primera prueba salió positiva, y la segunda es negativa…”, ese paciente es un falso positivo y no está infectado.
¿Cuáles son las secuelas con las que se quedan las personas?
Los pacientes se quedan con muchas secuelas, están deprimidos, no pueden dormir bien, les duele la cabeza de manera persistente, otras personas pierden un poco el oído, el olfato o el gusto por varias semanas, otras personas tienen dificultad para respirar, se cansan al caminar, etc, todo eso son secuelas. No es que tengan el virus, sino que el terremoto inmunológico destruyó sus sistemas y el organismo está tratando de reconstruirse. Eso se llama secuelas del COVID, no es que tengan COVID activo.
Respecto a la vacuna, ¿las personas que han tenido COVID-19 se tienen que vacunar?
Yo los pondría en la cola, no en la primera ni en la segunda línea. Si yo tengo que vacunar en el país, le voy a decir a los que tuvieron probadamente COVID-19 que no se vacunen en la primera línea. Si tienen anticuerpos eso es suficiente, eso es como una vacuna. Es como si tú ya tuviste sarampión, no te voy a vacunar para el sarampión. Por eso te miden los anticuerpos, y si tus anticuerpos son positivos, estás protegida. Por ejemplo, si yo te vacuno y descubro que tú ya tuviste COVID-19 hace cuatro meses, esa dosis no te va a hacer daño, será como un refuerzo. Pero como van a escasear las vacunas mi consejo es que las personas que hayan tenido COVID-19 si quieren se exoneren de ser vacunados.
En el caso de las personas que nunca recibieron una vacuna, ¿es recomendable ponerse la vacuna del COVID-19 o ponerse una vacuna en general?
Sí, las vacunas no hacen daño. En especial, las personas mayores porque el COVID-19 no se va a ir así no más.
En el tema de las reinfecciones, las cifras indican que los casos son mínimos y que en el Perú aún no existe la tecnología para hacer una prueba que pueda determinar si una persona ha sido re infectada. Sin embargo, hay muchas personas que indican que se volvieron a hacer la prueba y dio positivo nuevamente, ¿podría aclararnos mejor este panorama?
Así es, aquí no tenemos esa tecnología. En el mundo los casos de reinfecciones son mínimos, no llegan a 50. Lo que sucede es que el PCR puede durar tres, cuatro o más meses. En el camino los pacientes con COVID-19 van a tener otras enfermedades, van a tener más bronquitis, más infecciones virales, más diarreas… porque su sistema inmunológico no quedó bien parado. Pero eso no quiere decir que recae, eso es un error también. Decir: “¡ah! mira mi prueba ha salido positiva eso quiere decir que me he contagiado de nuevo…”, no, no es así.
Claro, el PCR como explicó puede durar varios meses.
Así es, puede durar en un tercio de las personas hasta cuatro meses. Los anticuerpos te pueden durar meses, y la IgG te va a durar años. Así que las pruebas no sirven para establecer eso, nadie aceptaría que eso es una recaída, esa es una segunda infección diferente al COVID-19, en un paciente que ya tiene un daño pulmonar u otra enfermedad, pero no es que la persona se reinfectó.
Los diagnósticos que están dando muchos médicos de centros de salud, hospitales e incluso clínicas no están siendo correctos…
Por supuesto, un problema es que se sacan protocolos y no los cambian. Siguen protocolos que fueron escritos en abril y mayo de este año, hoy en día ha cambiado totalmente el conocimiento de estas enfermedades. Yo he hablado con varios laboratorios que es un error que digan que “el paciente tiene IgG e IgM todavía está contagiando…”, eso es falso. “El paciente tiene síntomas cuatro meses después, y su prueba es positiva, se ha re-infectado…”, eso también es falso.
Espero que esta información les haya ayudado a resolver dudas y saber cuáles son los pasos a seguir de una persona que tuvo COVID, con síntomas leves y sin complicaciones. Cuídense mucho y protejan a los más vulnerables, en especial ahora que la fase 4 ya se activó. En mi caso mis síntomas fueron leves pero cada organismo es diferente y sé de personas que la pasaron muy mal, incluso, algunas perdieron la vida. ¡No bajemos la guardia!
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